5 juegos para aprender los colores

Cuando rondan los 2 años de edad, empiezan a saber identificarlos y, sobre los 3 años, ya pueden comenzar a aprenderlos. 

Como con el resto de aprendizajes, el juego siempre es un gran aliado. De forma divertida, pueden aprender los colores y sus nombres. Además, supondrá un buen rato que pasar todos juntos. 

1.- Buscar el color 

Este es un juego muy sencillo y práctico, en el que no necesitamos ningún utensilio. Consiste en proponer un color al niño, o dejar que lo escoja él, y después decirle que busque un objeto que tenga ese color. Cuando lo haya encontrado, podemos proponer otro color o preguntarle por el nombre del objeto. De esta manera, también estaremos enriqueciendo su vocabulario y definición de las cosas.  

Otra opción es colocar varios objetos, de distintos colores, delante del niño e ir diciendo colores. Él tendrá que señalar el objeto del color que indiques cada vez. 

2.- Relacionar colores 

Mediante esta dinámica, además de memorizar los nombres de los colores, también los relacionará con su entorno. Para este juego le mostraremos imágenes, de libros o que tengamos en casa, por ejemplo, y pedirle que relacione los colores que ve en ellas con los de sus juguetes u objetos de alrededor. Podemos buscar varios objetos de un mismo color, o ir a objeto por color. 

3.- Día del color 

Mediante este juego, haremos días temáticos de cada color. Cada día elegiremos uno y buscaremos una prenda de vestir con ese tono, para ese día, o cocinaremos cosas que tengan esos colores, por ejemplo. De forma divertida y sencilla, estaremos poniendo la atención en cada color y trabajando la mente para buscar las coincidencias. 

4.- El clásico “veo, veo” 

Todos conocemos y hemos jugado al clásico juego del “veo, veo”. En este caso, para seguir aprendiendo los colores, podemos hacerlo de temática cromática. Mediante este juego, iremos diciendo que vemos objetos de diferentes colores, para que los vaya buscando y localizando por la zona en la que nos encontremos. 

5.- Bloques  

Una vez más, los bloques de construcción son un juguete muy útil y que ofrece muchas posibilidades. Para aprender los colores, podemos elegir construir cosas sólo con los bloques de un determinado color. También podemos optar por construir siguiendo una escala cromática, estimulando así la secuencia lógica del pensamiento.